En el torneo Interbarrial Diario El Universo, donde los sueños de muchos niños se entrelazan en cada jugada, hay una figura especial que resalta en las gradas. Es Ana Fuentes, la abuelita de Misael y Matías Flor, jugadores del equipo Cantera Playas, y quien ha asumido un rol mucho más allá del de una simple espectadora. Para ella, cada partido es una cita imposible de faltar donde cada gol es una celebración y cada derrota es una enseñanza. “Hay que darle ánimos al equipo para ganar, todos son mis nietos, a todos los adoro, jugamos con fe”, dice Ana con una sonrisa mientras no deja de mirar el partido e intentar, desde las gradas darle indicaciones a su nieto Misael.
Ana no solo acompaña a sus nietos a cada entrenamiento, sino que con su entusiasmo y palabras de aliento ha sabido ganarse el cariño de todo el equipo. Las mamás y familiares comentan que es ella quien le pone la chispa y el empuje al equipo, siempre en la primera fila de las gradas, transmitiendo una energía positiva que contagia.
Además de apoyar a sus nietos en el deporte, Ana reconoce la importancia de estos torneos como espacios de crecimiento y oportunidades para alejar a los niños de los riesgos y vicios de la calle. «Es excelente la labor que realiza el alcalde Aquiles Álvarez, porque hay muchos niños que, a veces, estando en la calle adquieren malos hábitos, pero con el deporte, se dedican a esto y se alejan de esos vicios», comenta Ana.
La presencia de Ana Fuentes dentro de Cantera Playas ha hecho del fútbol un refugio y un espacio de aprendizaje para Misael y Matías, quienes dicen estar orgullosos de tener una abuelita que es como su mamá y nunca deja de alentarlos. Cada partido del interbarrial es, para ella y para muchos otros, una celebración de la vida, del esfuerzo y de las ilusiones de un grupo de niños que sueñan con alcanzar las grandes ligas.
