Atlético de Madrid Ecuador se coronó como el equipo campeón de la categoría 2007 en la última edición del Interbarrial Diario EL UNIVERSO. Desde el inicio de sus enfrentamientos en la cancha, este equipo exhibió agilidad, potencia, garra y, sobre todo, un espíritu de camaradería innegable.
Cada miembro del grupo dejó su huella en los encuentros disputados, pero fue John Vivas, el joven guayaquileño de tan solo 15 años, quien se destacó especialmente como arquero. Vivas se erigió como la columna vertebral del equipo, exhibiendo habilidad, reflejos y un coraje inquebrantable mientras protegía la portería con fervor y pasión. Más que un simple guardameta, demostró ser un estratega en el campo, coordinando la defensa y manteniendo la calma en los momentos de mayor presión.
Desde su infancia, el futbolista mostró una pasión desbordante por el fútbol. Confiesa que cuando era pequeño solía escaparse de casa para jugar en las canchas de su barrio y así fue cosechando esa pasión que tiene por este deporte. Empezó a formar parte de las filas de un equipo oficialmente en Barcelona, pero estuvo muy poco tiempo allí. Luego se tomó un descanso hasta que probó suerte en la academia que ahora considera su formativa. «Cuando tenga una carrera profesional más amplia, me gustaría jugar en el Atlético de Madrid de España», menciona el deportista, quien además señala que los trabajos que realiza en su academia lo van a ayudar mucho gracias a la enseñanza que recibe.
Acerca de qué equipo nacional le llama más la atención, menciona que si tuviera la oportunidad de elegir sería el Independiente del Valle y respecto a su modelo a seguir en estilo de juego es Thibaut Courtois, arquero de la selección de Bélgica. Según Vivas, Courtois le ha enseñado valiosas lecciones sobre cómo actuar bajo los tres palos. La humildad y dedicación son características que distinguen al arquero del Atlético de Madrid Ecuador, quien asegura que cada vez que pisa la cancha confía en la voluntad de Dios para que guíe su desempeño en cada partido.
John es un jugador completo. Él no solo ejerce como arquero, ya que confiesa que también se desempeña muy bien como delantero y lateral. Por ello, ha dividido sus entrenamientos en dos etapas: una en la que pulsa su talento como jugador y otra en la que perfecciona su técnica como arquero. «Si yo pudiera describir en una sola palabra lo que siento cuando estoy en el campo, sería alegría». (I)
